miércoles, 15 de febrero de 2017

Todo lo que necesito...

No pido mucho a la vida, solo un amanecer que me permita seguir soñando, que me haga sentir que a pesar de los sinsabores se puede seguir creyendo en los demás. Un amanecer con sol o con lluvia, da igual… los dos tienen su encanto, los dos abren una puerta a la ilusión, y a la posibilidad de  ir cambiando las cosas que no me gustan.
No pido mucho a la vida, solo unas horas más…
esos minutos que tienen magia porque me transportan a otros lugares. Hoy estoy en Venecia, escribiendo  una historia que ya me atrapó, y que me ha sacado de esta habitación  en donde el silencio  es la música que da paz a mi alma, y a veces la atormenta cuando escucho el eco de mis pasos.
No pido mucho a la vida, solo un atardecer que me sirva de inspiración mientras tomo una taza de café. Ese instante cuando  la oscuridad se va asentando con calma, despertando los versos que duermen en mi corazón; avivando la prosa que bulle en mi interior y que encuentra salida en este momento del día.
No pido mucho a la vida, solo una noche en donde guardar mis esperanzas, en donde  encontrarme contigo en medio de mis sueños, para luego decirte adiós y guardarte como un secreto.
Quiero mi guitarra, mi fiel compañera de momentos nostálgicos, sobre la que derramé lágrimas, furia, amor, desamor y olvido.
Quiero mi música, las notas del piano que siempre engríen mi alma mientras me pierdo en mis pensamientos, mientras busco tu mirada.
Es todo lo que necesito para seguir viviendo…
Para seguir soñando...
Para seguir pensando que algún día me encontraré contigo.
Pilar

“Soñar es solo el principio”

No hay comentarios:

Publicar un comentario