sábado, 22 de abril de 2017

En soledad...

Despierto y veo tu mano sobre la mía,
y me siento feliz porque no estoy sola.
Tú me acompañas en esta habitación de paredes blancas,
y muebles fríos,
junto a mi cama, mirándome; y diciéndome en silencio que soy importante para ti.
Cierro los ojos y vuelvo a dormir, y sigo viéndote en mis sueños.
Te quiero, murmuro, y tú me abrazas porque no tengo fuerzas  para darte un beso.
Estoy cansada, pero tus brazos me reconfortan,
y como los sueños tienen magia, de pronto ya no estamos aquí,
¿Escuchas el mar?
Huele el aire, siente la brisa con sabor a sal,
mira las gaviotas cómo alzan vuelo mientras nos acercamos a ellas.
¿Ves el sol cómo se oculta en el horizonte?
¡Pide un deseo!, te digo sonriendo.
… y yo en silencio pido el mío: estar en tus pensamientos, y acompañarte por las noches cuando no puedas dormir.
Seguimos caminando por la orilla mientras recuesto mi cabeza sobre tu hombro, sintiendo que estoy completa:
El mar…
El atardecer…
Y tú, dándome el beso más dulce que enternece mi corazón.
Te miro a los ojos y soy feliz.
Pero despierto y no estás,
nunca estuviste conmigo,
tu mundo y el mío van en direcciones opuestas.
Mientras tú tienes un amor,
yo estoy sola, recordando las cosas que me decías,
y preguntándome si fuiste sincero,
o solo un caballero galante que decías palabras que yo quería escuchar.
Esta noche te extraño,
esta noche quiero tu mano junto a la mía.
Esta noche quiero que me abraces,
Esta noche quiero escuchar tu voz,
esta noche quiero ser la mujer que amas,
 y sentir por unos minutos tu amor.
Pilar

“Soñar es solo el principio”

jueves, 20 de abril de 2017

Cuando solo quieres hablar...

Qué será de mí después de esta tarde,
cuando tras bastidores tengo el alma abierta,
y el corazón latiendo despacio y muerto de frío.
Cuando el agua sigue corriendo bajo el puente,
el reloj continúa con su tic tac,
y el tiempo sigue inexorable sin importarle las historias, las lágrimas y los sueños que van quedando en el camino.
Qué sería de mí si dejo de luchar,
si me entrego a mis miedos y a mis grandes temores.
Si me pierdo en la locura y no recuerde ni mi nombre,
ni mis culpas, ni quién fue la inspiración de tantas palabras que me salieron del corazón.
Qué sería de mí si me olvido de la escritora y me sumerjo en mis penas, las que escondo, las que callo, las que me obligo a no sentir.
La escritora me salva…
Ella me levanta…
Ella es la parte fuerte…
la que me sacude cuando no quiero abrir los ojos,
la que me ayuda a nadar cuando voy en contra la corriente.
Pero hoy la escritora también está cansada,
y me ha pedido una tregua, y es por eso que esta tarde no hay versos,
ni palabras bonitas que adornen mi soledad.
La estrella solo es un astro,
la noche solo es oscuridad.
Los besos la unión de dos bocas ansiosas o acostumbradas a esa rutina.
Y el amor… ¿Qué es el amor?
¿Tú sabes qué es el amor?
La escritora puede envolverte en argumentos y en historias hasta convencerte de que el amor tiene el poder de cambiar tu vida.
¿Tú crees que es verdad?
Yo creo que puede elevarte al cielo o puede empujarte al abismo con una palabra,
con una mentira,
con tanta indiferencia.
Hoy es una noche de esas donde quiero hablar de todo y de nada.
¿Te ha pasado lo mismo?
Pero es una noche donde tengo el corazón en carne viva,
y en cada poro de mi piel mis emociones.
Es una noche donde hace falta un bandoneón y las notas de un tango para acompañar mi pena,
tal vez una copa de vino para que empiece a fluir mi tristeza,
y los versos de Benedetti para soltar las lágrimas que ya no quiero llorar.
Pilar

“Soñar es solo el principio”

martes, 18 de abril de 2017

A la luz de las velas...

A la luz de las velas quiero soñar contigo,
quiero perderme en el tiempo y encontrarte en mi camino,
quiero mirarte y no cansarme de mirarte,
hasta dibujar tu cara con el pincel de mi memoria.
Delinear tu rostro sobre mi almohada,
y ponerle color a tu mirada.
Enmarcar tus ojos bajo tus cejas pobladas,
 y encuadrar tu retrato dentro de mi corazón,
para que siempre estés conmigo.
A la luz de las velas quiero decirte que te extraño,
que me siento perdida escribiendo historias que nada tienen que ver conmigo,
con finales felices y besos perfectos,
y el infaltable “te amo”, que pone punto final a una novela de amor.
A la luz de las velas  voy componiendo una canción,
y entre cada melodía  ventilo mis emociones,
y libero al viento el amor que siento por ti.
El dolor de tu ausencia…
Tu indiferencia…
Tus silencios…
Y mi resignación.
A la luz de las velas dejo caer mis lágrimas,
las últimas que aún quedan en mi alma.
Y aunque te siga soñando, y siga pensando en ti,
no volveré a pronunciar tu nombre,
y no volveré a repetirle a nadie,
que tú fuiste el amanecer más lindo que vi desde mi ventana,
el príncipe que se colaba en medio de mi sueño,
el que supo acariciarme a la distancia,
y la historia de amor que jamás pude escribir.
Pilar

“Soñar es solo el principio”

domingo, 16 de abril de 2017

Sin vergüenza...

Hoy es una noche especial,
después de una cena con vino  y palabras de amor,
me siento libre de expresar mi deseo.
Te pedí que te sientes y me esperes en la penumbra,
mientras dejo la vergüenza y  cubro mi cuerpo con un baby dool.
Me miro al espejo y apenas me reconozco,
¿esa mujer sensual soy yo?
La prenda apenas cubre mis formas, me veo atrevida, glamorosa;   una “femme fatale” dispuesta a usar sus atractivos para conquistar  a su hombre.
El corazón me late con fuerza, pero deseo tener una noche loca,
de esas que no se olvidan jamás,
donde no hay límites para la pasión que quiero encender en la habitación.
Prendo la música y salgo del baño moviendo mis caderas,
balanceándome con swing al ritmo de las guitarras.
Te coqueteo con los ojos…
Te seduzco con mis movimientos…
… Y te tiento mientras me acerco y bailo frente a ti.
No siento vergüenza de  expresar mi deseo,
No siento vergüenza de cada movimiento que tiene la intención de provocarte.
Y ahí estás tú…
Mirándome embelesado, con ganas de acariciarme,
mientras mi cuerpo apenas roza tu cuerpo…
mientras mi boca apenas roza tu boca…
mientras mis manos apenas rozan tu piel…
Y me pierdo en medio de la música con movimientos sensuales,
mientras te miro…
mientras te digo sin palabras  que te deseo,
que eres mi locura, y la pasión que enciende mi sangre.
La música termina y yo sigo dispuesta a enloquecerte,
y te beso con premura, y encuentro la respuesta que busco.
Tú me quitas el baby doll,
y yo te quito la ropa,
y en medio de una noche loca,
dejamos la vergüenza para amarnos,
sin censura, guiados por el instinto,
dejando en cada gemido el placer que tú provocas en mí,
y que yo te incito con mis caricias.
 (Extracto de un sueño)
Pilar

“Soñar es solo el principio”

sábado, 15 de abril de 2017

Estás aquí..

Estás aquí mientras escribo,
sentado a unos metros leyendo algún libro que cayó en tus manos.
Me miras de rato en rato a través de tus gafas, y yo sonrío.
Qué más puedo pedirle a esta noche si estás conmigo,
si soy tu paisaje en medio de esta habitación,
 si soy la estrella que brilla en tu mirada,
si soy el motivo de tu felicidad.
¿Quieres un café?, te pregunto.
Quiero un beso, respondes, y siento que me acaricias con tu mirada.
Yo dejo todo para complacerte, y para complacer a mis labios que siempre tienen ganas de ti. A mi boca que busca perderse en tu boca para robarte tu aliento, y dejar en tu tibieza algo más de mí.
Me siento sobre tus piernas y me besas con ternura,
tus manos rodean mi cintura mientras me ciñes a tu cuerpo.
Y yo disfruto de ese beso que hurga despacio en mi humedad, jugando sensualmente con mi lengua, calentando mi sangre y tiñendo tu mirada de pasión.
Estamos agitados y mirándonos con amor.
Dime que no es un sueño, murmuro, que tú estás aquí, que eres real.
Estoy aquí, y soy real, me respondes, y vuelves a besarme despacio, con la habilidad de un seductor que sabe cómo enloquecer con sus caricias. Y yo caigo en el abismo de tu boca que aún guarda secretos para mí,
secretos que iré descubriendo a lo largo de las muchas noches que aún nos faltan por vivir.
Estás aquí… en esta habitación que huele a ti,
que reconoce tu sombra en la penumbra,
que reconoce tu voz cuando pronuncias mi nombre.
Tu libro queda a un lado,
mi historia a medio escribir,
solo importan los besos que vas dejando en mi cuello, 
y que yo voy dejando sobre tu piel.
Te quiero, susurro, mientras quito uno a uno los botones de tu camisa.
Te quiero, respondes, mientras tus manos adoran mi cuerpo hasta convertirme en cometa por el fuego de tus besos,
por el calor que desprenden tus caricias sobre mi piel.
Te miro…
Me miras…
Y los dos volamos hacia el infinito en medio de esta noche que nos observa silenciosa, sintiendo celos de nuestra entrega, de este amor que ya no cabe en nuestros corazones.
Estás aquí mientras escribo,
ahora duermes y yo estoy llena de ti,
llena de cada detalle que dejaste con tus labios,
llena de cada regalo que me ofreciste con tus manos.
llena de tu mirada que me hizo sentir una diosa, la más hermosa de todas.
Llena de tus palabras que endulzaron mis oídos,
Con tu acento…
Con tu ternura…
Con cada frase que ha quedado grabada en mi alma.
Estás aquí mientras escribo,
¿qué más le puedo pedir a la noche?
Si tú eres mi paisaje…
la inspiración de mi corazón,
y  el motivo de mi felicidad
(Extracto de un sueño)
Pilar

“Soñar es solo el principio”

viernes, 14 de abril de 2017

Confidencias...

Me gusta escribir porque a través de las palabras me libero,
porque no hay caretas,
porque no hay límites que detengan mis pensamientos,
porque mi alma se descarga de tantos secretos, culpas y  sufrimientos. Porque entre líneas y capítulos voy deshojando algo de mí, voy confesando mis miedos y los anhelos que guardo dentro del corazón.
Me gusta el silencio porque escucho el eco de mis latidos recordándome que estoy viva.
Que soy más que piel…
Más que un cuerpo que poco a poco envejece.
Me gusta mirar al cielo y perderme en mis pensamientos, recordar mis sueños y emocionarme pensando que algún día se harán realidad.
Me gusta la mujer en la que me he convertido, la que el tiempo fue esculpiendo con cada desengaño, cada alegría, cada llanto, cada decepción. Las personas que me dañaron  me hicieron un gran favor, me lanzaron al ruedo, y no tuve otra opción que ser fuerte, porque ese era el único camino para sobrevivir. Entonces me di cuenta que viví engañada por mucho tiempo: No era cobarde, y tampoco la mujer frágil que pensaba.
Ahora veo todo con más claridad, y no me arrepiento de nada.
Estoy sola, con mis ilusiones dentro del bolsillo y un gran vacío dentro del corazón. Algunos nacieron para disfrutar del amor, y otros solo para escribir historias románticas.
Mi almohada ya no tiene un duende.
Mis suspiros ya no tienen un nombre.
Mis caricias se han congelado entre las yemas de mis dedos, estoy invernando en medio de este otoño que se ha llevado mis ilusiones, y apagó con un soplido, las esperanzas que alborotaban mi corazón.
Pilar

“Soñar es solo el principio”

martes, 11 de abril de 2017

En una noche de otoño...

Desperté y no estaba sola,
la luna me acompañaba desde mi ventana,
ya no le pregunté por ti,
ahora sé que tienes un amor,
que alguien te extraña,
que alguien espera por ti.
Sentí envidia…
Sentí celos…
Pero todo se desvaneció cuando imaginé que tú eres feliz,
es que el amor no es egoísta,
es generoso…
es desprendido…
es la esencia de la vida que busca su complacencia en  la felicidad del otro.
Yo también quiero encontrar un lindo amor,
mirarme en otros ojos y verme feliz,
Sentirme plena…
Sentirme acompañada…
Sentir que mi alma por fin ha encontrado su mitad.
Reír con la mirada…
Besar con el corazón…
Amar con cada célula de mi cuerpo.
Saber que alguien me extraña.
Pero estoy sola, con la luna en mi ventana,
alejándote de mis pensamientos,
dejándote ir en esta noche de otoño.
Huele a melancolía,
¡Dios!, cómo duele dejarte ir…
Pero en esta noche de otoño me despido de ti…
Guarda mis secretos...
Guarda mis locuras...
y guarda en tu corazón lo que te escribí, todo es verdad.
Adiós, príncipe de los ojos verdes,
me alegra que seas feliz.
Tal vez en otra vida te encuentre…
Tal vez una noche cualquiera coincidamos dentro un sueño y compartimos un café.
Tal vez…
O tal vez nunca te encuentre porque no fuiste real,
Fuiste solo un lindo sueño,
el sueño más lindo que he tenido jamás.
Adiós…
Pilar

“Soñar es solo el principio”

lunes, 10 de abril de 2017

Aquí estoy...

Aquí estoy…
como siempre entre mis cosas,
sintiendo el aire que refresca mi habitación.
El sonido de una melodía siempre sirve de fondo a mis pensamientos.
El café aún está tibio,
mi gato en un rincón,
y mis emociones encontrando un camino dentro de tanto laberinto que a veces armo con razón, y otras porque exagero un poco.
Pero…
Aquí estoy,
a veces te siento cerca, muy cerca…
coqueteando…
atemorizando…
asustando con tu poder…
Pero, ¿sabes?
Ya no te tengo miedo.
Sé que puedes llevarme y cortar con mis sueños de un solo tajo,
cortar en un segundo mi respiración.
Helar mi sangre…
Congelar mi sonrisa…
Cerrar mis ojos para siempre…
Acabar con mis lágrimas y mis culpas.
Pero ya no huiré,  ahora te enfrento cara a cara.
Aquí estoy…
si quieres llevarme, hazlo…
no habrá nadie que me extrañe en mi cama.
No habrá un cuerpo que se quede esperando por mis caricias.
No habrá una boca que extrañe mi boca.
No habrá un corazón que deje de latir porque ya no esté.
No habrá un alma que se sienta perdida porque mi alma ya se fue…
Tal vez solo me extrañen las historias que se quedan a medio escribir,
personajes atrapados sin un final feliz.
… los demás tienen su vida, tal vez mi gato deje de comer porque ya no me encuentra.
Pero aquí estoy…
Ven cuando quieras y llévate mi último aliento.
Me encontrarás con mi mejor sonrisa,
tal vez leyendo a Becker…
“Por una mirada, un mundo;
Por una sonrisa, un cielo;
Por un beso… ¡Yo no sé qué te diera por un beso!
Habría dado todo por tu beso…
O tal vez me encuentres repitiendo mi poema favorito de Benedetti:
“Unas veces me siento como pobre colina,
y otras como montaña de cumbres repetidas.
Unas veces me siento como un acantilado,
y en otras como un cielo azul pero lejano”
Tal vez cuando vengas tenga un café entre las manos, o  una cerveza bien helada,
pero seguro me encontrarás aquí, mirando por la ventana,
y preguntándome en silencio qué será de mi príncipe de ojos verdes,
el hombre que dejó a su paso una estela de ilusión…
besos en el aire…
caricias perdidas…
… un amor que nunca pudo ser.
Aquí estoy…
La sombra anuncia tus pasos,
el frío envuelve tu nombre,
¿Será hoy día? ¿Mañana? ¿O huirás como un cobarde porque ahora te doy la cara?
Es verdad que estoy muy cansada, pero ya no me esconderé bajo las sábanas.
Aquí estoy…
escuchando a Perales y su canción… “Quisiera decir tu nombre”
Pero tu nombre será mi secreto, mi bello hombre de los ojos verdes,
Tú lo quisiste así…
aunque hoy lo repito en medio de esta canción que me acompaña, y que se ha vuelto cómplice de este bonito amor que hoy guardo para siempre dentro de mi corazón.
Pilar

“Soñar es solo el principio”

viernes, 7 de abril de 2017

Te acordarás de mí...

 
Te acordarás de mí alguna noche solitaria,
cuando dejes a un lado las novelas fantásticas que te gustan leer.
Cuando el vino de tu copa se acabe,
cuando repares que es invierno y estés solo en la habitación de un hotel.
Cuando el paisaje que te rodea es el mismo y ya nada llame tu atención. Esa noche… te acordarás de mí.
Cuando te canses de jugar al caballero encantador que va en busca de aventuras…
de falsas sonrisas…
de caricias prestadas…
de caricias de paso…
Cuando te hastíe lo burdo y lo carnal, los besos sin alma y las miradas que no dicen nada. Esa noche… también te acordarás de mí.
Te acordarás de esa princesa que encontraste dentro de un cuento y que te decía de muchas maneras que te quería.
La mujer que se convirtió en poeta solo por ti, para decirte en verso que estabas dentro de mis pensamientos.
Dejé que mi corazón hablara para que le dijera a tu corazón que no estaba solo, y que podía contar con cada uno de mis latidos.
Por eso…
Te acordarás de mí alguna tarde de otoño,
cuando esperes el tren en alguna terminal vacía,
quizá tomando café,
quizá perdido en tus pensamientos.
Y recuerdes que te abrí mi alma…
Que compartí mis sueños…
Te confié mis temores…
Por ti fui  luna en tu ventana  mientras dormías,
 y por ti quise ser viento y rozar tus labios con un beso.
Te acordarás de mí en medio de tus sueños,
y quizá te preguntes si todo lo que sentí fue real,
y quizá te preguntes cómo habrían sido mis besos,
y por qué dejaste que me perdiera en la bruma de una noche cualquiera, mientras esperaba por ti.
Te acordarás de mí porque nadie te escribirá versos al atardecer,
porque nadie hará de tus ojos verdes el principio y el fin de este mundo,
porque todas te ofrecen locura, pasión, deseo; lujuria con sabor a licor,
y yo simplemente quería engreír tu corazón,
y cuidarlo como se cuida a una flor…
y protegerlo del frío y los desengaños.
Por eso…
En alguna noche solitaria, tú te acordarás de mí.
Pilar

“Soñar es solo el principio”